—Eso es ciertamente cierto —Ro recibió la actitud de Lara con una burla—. Todavía no has visto la verdadera acción. ¡Esto es solo una brisa comparado con lo que sufrimos en sus manos!
—Y todavía no has experimentado ni una sola sesión de entrenamiento con él —Peter hizo una pausa, como si pensara en algo horroroso—. Solo espera... Lo sabrás todo cuando veas lo duro y estricto que es.
—¡Es William, no un monstruo! —Lara no podía creer cómo hablaban de William, pero sus palabras solo adornaron sus patéticas miradas, unas que mostraban más simpatía que apoyo.
—Si fuera un monstruo, nos habría enviado a luchar allá fuera —Karoline se unió a la diversión, apoyando a Lara en esto.
—¡Vamos! Como si quedarse atrás y hacer el papeleo no fuera suficiente tortura, Sara rodó los ojos—. ¡Prefiero ir allá fuera y luchar! Sean monstruos o maestros oscuros, no me importa.
—¡Yo también!
—¡Estoy de acuerdo con eso!