Después de hablar un poco más con Julián acerca de la propuesta y si estaban listos o no para discutirla en la próxima reunión, Valyr finalmente cambió el tema de su conversación hacia algo que sentía que necesitaba abordar previamente.
—Corrígeme si me equivoco, pero el asunto del terreno que compré ya está resuelto, ¿verdad? —preguntó el joven con ligera curiosidad.
—Básicamente —Julián asintió en respuesta, antes de abrir una brecha y poco después sacar un trozo de pergamino—. Hubo un par de obstáculos aquí y allá, pero llegamos allí al final.
Al recibir el pergamino que le fue dado, era obvio que el joven lo examinó en detalle.
Tomando nota de las diversas líneas de texto escritas en él, Valyr lo resumió básicamente como una lista de lo que necesitaba tener en cuenta ahora que era el propietario de un terreno dentro del Reino de Argelia.