Salir

Rui casi sintió su corazón palpitar mientras intentaba calmarse. Estaba agradecido de ser lo suficientemente paranoico como para memorizar la posición de cada cadáver, de lo contrario, nunca habría notado que faltaba uno.

—Espera, cálmate —entrecerró los ojos.

—Las raíces dañaron mucho este piso, quizás quedó enterrada bajo los escombros

Inmediatamente enfocó sus sentidos profundamente bajo tierra, recorriendo todo el sustrato del piso, rezando por encontrarla.

—Mierda... —se dio cuenta de que no había rastro de ella.

Simplemente había ingresado la totalidad de su visión espacial en su Palacio Mental cuando escaneó los cadáveres, por lo que también había memorizado inadvertidamente sus características físicas y sus apariencias.

Podía decir claramente que faltaba un cadáver.

—¿Pero cómo? —entrecerró los ojos.

—¿Cómo puede desaparecer un cadáver?