Karyk permanecía en silencio, tratando de pensar en una manera de entrar a la ciudad. Podría entrar simplemente forzando su paso. Incluso podría usar el mismo ataque que usó para matar a la hermana del Emperador y destruir la barrera.
Pero al final, sabía que ambos planes eran problemáticos. No quería que su exploración del Cementerio Real fuera más problemática.
—Es hora de tu ayuda. —Movió su mano, y un Portal Espacial se abrió a su alrededor.
El Portal Espacial era mucho más grande que antes, pareciendo una puerta. Desde el portal, salió un hombre vestido con el Atuendo de General.
Curiosamente, el hombre no era otro que el General que había escapado de la Dinastía Celestial, solo para ser asesinado por él.
Sus ropas ensangrentadas habían sido cambiadas. Ahora vestía un atuendo completamente idéntico que estaba mucho más limpio. Estas eran las ropas que Karyk había hecho que su gente confeccionara sin decirles para qué eran.