Mientras Gabriel chocaba espadas con el Líder de los Guardianes de la Sombra, el poder combinado fue suficiente para hacerlos retroceder a ambos volando.
El Líder de los Guardianes de la Sombra estaba verdaderamente en una liga diferente, especialmente después de que comenzó a usar su esencia vital para utilizar este poder desconocido.
Sus movimientos eran más rápidos y precisos. Y su fuerza estaba más allá de los límites de este mundo.
El choque de sus espadas resonó a través de la ciudad vacía, una batalla que parecía desafiar las leyes de la naturaleza.
Incluso la barrera que Karyk había creado alrededor de la ciudad comenzó a resquebrajarse con este inmenso poder.
Tan pronto como Gabriel logró recuperar su equilibrio, se abrieron dos portales junto a él. Uno de los portales estaba a la izquierda, de donde salió una lanza negra como el carbón.