Mereces un Final Feliz [Parte 1]

Lux durmió durante una semana entera, sin abrir los ojos ni siquiera cuando Aurora le lavó el cuerpo en la pequeña piscina privada de su habitación.

Su estado físico, emocional y mental no estaban en las mejores condiciones después de que regresó a Elíseo.

Fue solo ahora que Lux pudo descansar realmente, por lo que su cuerpo se apagó por completo para evitar que el Medio Elfo despertara siquiera una vez hasta que estuviera completamente recuperado.

Cuando Lux abrió los ojos, lo primero que vio fue a un lindo bebé mirándolo.

Sus hermosos ojos dorados lo miraban con curiosidad, y una leve sonrisa se podía ver en su rostro.

Lux pensó que podría estar en un sueño, así que extendió su dedo para tocar ligeramente la mejilla del bebé.

La sonrisa en el rostro del bebé se amplió, y sus ojos parecían sonreír también.

El Medio Elfo no pudo evitar sentir su cuerpo entero calentarse de felicidad, derritiéndose por la expresión del bebé, a quien creía su hija, Dia.