Algo no se sentía bien.

En una habitación grandiosa, alrededor de una mesa gigante, se sentaban 10 seres.

9 de estos seres tenían características similares. Sus cabezas eran de un Halcón con ojos intimidantes y un pico fuerte, mientras sus cuerpos se asemejaban a los humanos con músculos adecuados que mostraban fuerza. No llevaban ropas para cubrir sus partes superiores, usaban un dhoti para cubrir sus piernas.

Entre estos 9 Halconianos, había un Halconiano que se sentaba en la cabeza de la mesa, a diferencia de otros seres sentados en la mesa que radiaban una energía fuerte que intimidaría a la mayoría de los seres en el mundo, él no radiaba energía alguna.

Sin embargo, la dignidad con la que se portaba era suficiente para indicar a los demás que era extraordinario.

Él era Prima Skythorn.

El Señor de la Ciudad de la Ciudad Halcón Skythorn y un Cultivador de la Etapa Divina.