Obviamente te resultaría difícil resistirte a mis ilusiones

—¿Puedes alejarlo? Está perdiendo nuestro tiempo —Astaria habló mientras señalaba el cuerpo de Ragnar que aún no habían retirado.

Después de todo, nadie en la arena entera se había recuperado de lo que acababan de presenciar, incluyendo a Rune.

—Tú... ¿cómo hizo ella... no, qué hizo ella...? —la felina preguntó mientras miraba a Nux con una expresión de shock en su rostro.

Sin embargo, Nux solo sacudió la cabeza y suspiró:

—¿No te lo dije? No estaba ni un poco asustada cuando entró a ese escenario. Estaba mintiendo.

—No estaba mintiendo~ —Aisha, con su cara aún enterrada entre el cuello y el hombro de Nux, respondió.

—¿Es así? —Nux asintió, continuando acariciando sus muslos y amasando sus pechos lo más delicadamente que podía.

—Mhm, estaba asustada. ¿Y si logra resistir mis ilusiones? ¿Qué habría hecho entonces? Quedo bastante debilitada después de que resistes mis ilusiones, ¿sabes? Es una debilidad fatal.