Vendré por ti y te robaré de tus esposas.

—Supongo que te contactaré después de unos pocos miles de años —dijo con sarcasmo.

—No te molestes, no te elegiré —respondió con frialdad.

Nux extendió su mano como si estuviera bloqueando a Faustina y negó con la cabeza.

—No tengo necesidad de buscar a alguien más porque estoy 'aburrido', tengo a mis esposas conmigo —afirmó con convicción.

Faustina solo sonrió, no dijo nada más ya que sabía que sin importar lo que dijera, Nux no escucharía.

¿Cuándo han realizado los niños que estaban equivocados antes de estar en esa posición ellos mismos? Dado que Nux era demasiado joven para darse cuenta por sí mismo, a Faustina no le importó dejarlo vivir con su mentalidad por un tiempo antes de que él finalmente entendiera sus palabras y cediera.

—Señorita Saphira... —de repente, Aeliana llamó.

—¿Hmm? —Saphira se giró hacia Aeliana y frunció el ceño, la Vampira finalmente preguntó lo que le había estado molestando todo este tiempo—. ¿Mi padre... es igual...?