Jiang Luoli vio primero sus largas piernas.
Mo Shixiu y Mo Yesi tenían un par de envidiables piernas largas. Ambos medían más de 1,8 metros de altura, y su apariencia, figura y ropa eran los mejores entre los hombres.
Jiang Luoli sintió que no tenía carácter.
Hace cuarenta minutos, pensaba que Mo Shixiu era un hombre serio que no merecía el afecto de ninguna mujer.
Pero ahora, al ver a este hombre cara a cara, su corazón comenzó a latir descontroladamente.
Su rostro empezó a arder.
Ya no estaba tan tranquila como antes.
A medida que él se acercaba a ella, su corazón latía más y más rápido...
Hasta que se detuvo frente a ella.
Jiang Luoli de repente se sintió nerviosa.
—Buenas noches, señorita Jiang. Nos encontramos otra vez —Mo Shixiu la miró desde arriba y sonrió.
El hombre era guapo y frío.
Pero cuando sonreía, irradiaba una sensación cálida.
Jiang Luoli sintió que estaba a punto de desmayarse.
En este momento, no podía pensar en nada.
Su mente estaba en blanco.