Chai Xiyang volvió a casa y vio a Qiao Ning sentada en la sala de estar, sumida en sus pensamientos.
Pensó que todavía estaba preocupada por la explosión en el set...
Chai Xiyang se movió silenciosamente detrás de ella y de repente le presentó un ramo de rosas rojas ardientes.
Qiao Ning saltó sorprendida...
Pero al ver las rosas, supo lo que estaba pasando.
Se giró sonriendo y en efecto vio la cara sonriente de Chai Xiyang.
—¿Hermano, cuándo entraste? —Qiao Ning tomó las rosas y preguntó sorprendida.
—¿No te diste cuenta? —Chai Xiyang contraatacó deliberadamente.
—No, no escuché nada...
Chai Xiyang fingió una mirada de dolor, "Pequeña Ningning, es porque estabas tan absorta pensando en otros hombres que ni siquiera me escuchaste. Ser tan ignorado por ti, realmente me rompe el corazón."
—¡En absoluto estaba pensando en otros hombres! ¡No digas tonterías! —Qiao Ning inmediatamente se levantó para defenderse.