—Hai Lan no necesitaba decir más —él sabía que cada palabra que ella decía era seria—. Ella no traicionaría su amor, por lo que definitivamente él no tenía oportunidad...
—Wen Jingheng se enderezó, sonriendo de una manera que no delataba emoción alguna —En realidad, sé que no debería continuar así. Pero, simplemente no puedo controlarme...
—Los ojos de Hai Lan parpadearon —Señor Wen, tal vez sea solo una infatuación momentánea. Si no tomamos contacto el uno con el otro por 2 meses, quizás me olvides.
—¿Tan fácil? —Wen Jingheng levantó una ceja—. Deberías saber, esta es la primera vez en su vida que se ha sentido conmovido.
—Hai Lan asintió —Sí, es tan fácil. Puedes intentarlo, después de todo, realmente no tenemos oportunidad.
—¿Y si después de dos meses, sigo sintiendo lo mismo por ti? —preguntó Wen Jingheng profundamente, la primera vez que había pronunciado claramente las palabras 'gustar de ti'.