Capítulo #2
Mientras los estudiantes entraban en el aula y tomaban sus asientos, Sarah observó con atención cómo el chico nuevo, caminaba junto a la maestra hacia la parte delantera del salón. Su presencia imponente y su actitud segura captaron la atención de todos.La maestra sonrió y dijo: -Buenos días, clase. Hoy tenemos un nuevo estudiante que se unirá a nosotros. Por favor, preséntate-.El chico nuevo miró a la clase con una expresión indiferente antes de hablar. -Hola a todos, me llamo Matthew y vengo de Alemania-, dijo con voz calmada pero firme.Los murmullos de interés se extendieron por el aula mientras los estudiantes se miraban entre sí, intrigados por el chico nuevo. Sarah notó cómo algunos compañeros de clase intercambiaban miradas curiosas y comentarios en voz baja.La maestra sonrió y asintió. -Bienvenido, Matthew. Espero que te sientas como en casa aquí en Westwood High-, dijo amablemente.Sarah observó a Matthew mientras se acomodaba en un asiento vacío que había a su lado. Su expresión era impasible, pero algo en sus ojos mostraba una chispa de determinación y misterio.-Hola perdona, ¿cuál es tu nombre?- pregunto Matthew mientras mostraba una sonrisa.-Hola, mi nombre es Sarah mucho gusto- respondió devolviéndole la sonrisa. -¿Que te trae a este instituto?- pregunto con una expresión curiosa.-Mi padre tiene unos negocios con una de las empresas más grandes en Florida, así que por eso termine aquí- contesto con una sonrisa picarona.La clase empezó y las horas iban transcurriendo mientras que Sarah y Matthew conversaban y comentaban sobre partes de la vida del otro y lo mucho que se entendía al estar en la misma situación por sus padres.-Bueno, creo que debo irme Sarah, ¿te parece si te invito a salir en algún otro momento?- pregunto con una sonrisa mientras acariciaba su mano.-Si!, me encantaría!- respondió Sarah con un poco de emoción en su voz. -Pero primero, ¿no deberías darme tu número?- pregunto mientras acercaba su teléfono.-Ohh... Olvidé decirlo, ya agregué mi número en tus contactos mientras estábamos hablando- respondió con picardía. -Espero con ansias poder tener una cita contigo- dijo mientras se despedía acariciando su mejilla.Sarah salió del salón y en el pasillo vio que estaba David repartiendo folletos, se acercó para preguntar de que se traba.-¿Que estás repartiendo?- preguntó Sarah mientras estiraba su mano para tomar un folleto.-Es un folleto, estoy intentando promocionar mi actuación de esta noche en el "Kudu Coffe bar"- respondió mientras seguía repartiendo boletos.-¡¿Vas a tocar?!- preguntó Sarah emocionada.-Si, voy a tocar y también cantaré- respondió David mientras la miraba. -Deberías ir, de seguro te encantará-.-Entonces está decidido, ¡iré a verte cantar!- exclamó emocionada mientras apretaba los puños, luego se sonrojo al darse cuenta de lo que había hecho.-Jaja entonces te estaré esperando- dijo David mientras intentaba ocultar su emoción.La noche caía suavemente sobre la ciudad mientras Sarah caminaba hacia la cafetería Kudu. Le había prometido a David que iba a verlo tocar esa noche y no quería perderse la oportunidad de verlo en acción. Cuando llegó, el lugar estaba lleno de gente, y Sarah se abrió paso entre la multitud hasta encontrar un lugar cerca del escenario.Justo en ese momento, las luces se atenuaron y David apareció en el escenario, con su guitarra en mano y una sonrisa en el rostro. Sarah se quedó sin aliento al verlo. Nunca se había fijado realmente en su apariencia antes, pero en ese momento, el resplandor en su rostro resaltaba sus ojos de un verde muy claro, su cabello amarillo y su piel blanca, haciendo que todo en él pareciera perfecto.Mientras David comenzaba a tocar "Stitches" con su guitarra, Sarah se encontraba completamente hipnotizada por su actuación. La forma en que interpretó la canción era absolutamente hermosa, con una combinación perfecta de pasión y habilidad. Cada acorde resonaba en el aire, creando una melodía cautivadora que envolvía a todos los presentes en la cafetería Kudu.Su voz, suave y emocional, transmitía cada palabra de la canción con una intensidad que llegaba directamente al corazón. Sarah se dejó llevar por la música, sintiendo cada nota como si fuera un susurro íntimo en su alma.A medida que la canción llegaba a su clímax, David tocaba la guitarra con una destreza impresionante, haciendo que cada nota pareciera fluir con facilidad bajo sus dedos expertos. Era evidente que había dedicado tiempo y esfuerzo a perfeccionar su arte, y su pasión por la música brillaba a través de cada acorde.Cuando la última nota se desvaneció en el aire, la multitud estalló en aplausos y ovaciones. Sarah se unió al clamor, con los ojos brillando de emoción y admiración por el increíble talento de David. En ese momento, se sintió agradecida de estar allí, presenciando algo tan especial y único, y sabía que nunca olvidaría esa actuación inolvidable en la cafetería Kudu.Luego de la actuación David bajó del escenario y se acerco a Sarah.-¡Viniste! Exclamó emocionado mientras abrazaba a Sarah.-¡Te dije que lo haría, estuviste espectacular!dijo Sarah emocionada mientras le devolvía el abrazo.-Acabas de hacer un cover increíble de la canción de Shawn y es uno de mis cantantes favoritos, estoy realmente fascinada- la emoción irradiaba de la voz de Sarah mientras sin darse cuenta no había soltado las manos de David.-!Perdón! Exclamó Sarah totalmente sonrojada mientras le soltaba las manos a David.-No te preocupes, me hace feliz que te haya emocionado tanto- respondió David mientras le acariciaba el pelo.-¿Te gustaría algo de beber?- preguntó mientras se dirigían a una de las mesas de la cafetería.La conversación fluyó entre ellos mientras compartían sus impresiones sobre la actuación y hablaban sobre música, sueños y pasiones compartidas. Sarah se sintió cada vez más conectada con David, admirando no solo su talento musical, sino también su sinceridad y calidez.Después de un rato, David se ofreció a acompañar a Sarah a casa. Juntos, caminaron por las tranquilas calles de la ciudad, compartiendo risas y confidencias bajo el suave resplandor de la luna.A medida que se despedían en la puerta de la casa de Sarah, David tomó su mano con ternura. -Gracias por esta noche, Sarah. Realmente disfruté pasar tiempo contigo-, dijo, su voz llena de emoción genuina.Sarah sonrió, sintiendo un cosquilleo en el estómago ante el cálido gesto de David. -Yo también lo disfruté, David. Espero que podamos hacerlo de nuevo pronto-, respondió, sintiendo cómo la chispa de conexión entre ellos crecía con cada momento compartido.Al acostarse en su cama Sarah se sintió un poco extraña debido a lo bien que lo había pasado con David, sin embargo también recordó lo bien que la paso en clases mientras hablaba con Matthew y sentía que debía poner en orden sus ideas.•~~•~~•~~•~~•~~•~~•~~•~~•~~•~~•~~•~~•~~•~~•-Así que esa fue la manera en la que conociste a David, ¿verdad Sarah?- preguntó la terapeuta.-Sí...- contestó Sarah con una expresión casi muerta.-Se que puede ser doloroso, pero es necesario para que puedas seguir adelante y que estas sesiones sirvan de algo- dijo la terapeuta mientras apuntaba datos en su libreta.-Y dime Sarah, ¿Que pasó después?-.