La expresión de Bai Luo era bastante interesante.
Originalmente pensó que su segundo hermano diría que si los niños no querían volver, los dejaría quedarse en Ciudad Sol. No esperaba que al final, los obligara a regresar. Este método simple y crudo era muy inconsistente con el estilo de su segundo hermano.
Bai Luo estaba muy sorprendido. —¿Debes llegar tan lejos?
—No quiero interferir con sus elecciones, pero el mayor deseo de Huanhuan es que su familia se reúna. Los demás ya están en camino a casa. Si Blanco Grande y Blanco Pequeño no pueden ir a casa, Huanhuan definitivamente estará preocupada por este asunto. No quiero que tenga ningún arrepentimiento.
Bai Luo entendió. —Puedo decir que Huanhuan se preocupa mucho por su familia.
—Tú también eres su familia.
Bai Luo recordó la última vez que Huanhuan lo abofeteó y no pudo evitar reírse de sí mismo. —Ella es muy feroz conmigo.