El Rey Escorpión Aparece (2)

Bai Qingqing se sintió incómoda por su mirada pero soportó las cosas después de recibir una afirmación de él.

—Siempre he estado curioso acerca de ti. ¿Qué tipo de hembra eres para atraer a tantos hombres bestia fuertes? Uno vino hace un mes para pedirme el antídoto, y otro vino ayer —dijo el rey escorpión.

Hace más de un mes... Debe ser Winston. Pero el pretendiente de ayer...

—Estás equivocado. El de ayer no es mi pretendiente. Solo nos conocimos ayer —explicó Bai Qingqing.

La mirada del rey escorpión tenía un toque de burla. —Como esperaba, ninguna hembra hermosa es buena.

Bai Qingqing se quedó sin palabras.

Explicó sin poder hablar, sin querer continuar con tonterías con él. —Solo quiero el antídoto. Tú fuiste quien causó que mi hija hembra fuera envenenada. Por favor, danos el antídoto —dijo ansiosamente.

—La razón por la que he venido es para darte el antídoto. Pero ¿sabes cuál es el precio que pagaron los dos machos?