Regreso a la Capital (2)
—Bastante bien —dijo Su Xiaoxiao—. Madre, no estés triste. Todos sabemos que Hermano Mayor ha recuperado su memoria. Simplemente no quiere admitirlo. Cuando complete su misión como soldado sacrificial, nos reconocerá.
Hablando de eso, ¿cuál era la misión de Temorfantasma?
No, ella no tenía curiosidad en absoluto.
La Señora Wei sonrió amargamente y no respondió.
Su Xiaoxiao miró la pesada cesta en su mano y dijo:
—Se la llevaré a Hermano más tarde.
La Señora Wei dijo apresuradamente:
—Esta cesta de naranjas doradas es para ti. Pequeño Seis ya se la ha enviado a tu hermano.
De sus tres hijos, solo Liulang era el de piel más gruesa. No tenía rencillas con nadie y trataba bien a sus hermanos y mayores.
—Gracias, Madre —Su Xiaoxiao tomó la cesta.
La Señora Wei quería decir algo pero vaciló. Tras dar unos pasos, se volvió hacia Su Xiaoxiao y dijo:
—Gracias… por cuidar de Pequeño Siete.
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