—Cada vez más expertos del interior de la corte se adentraban. Las artes marciales del Rey Nanyang eran sobresalientes, pero no podía resistir un combate de eliminación directa.
En un momento de desesperación, miró a la Emperatriz Viuda.
—Quería tomar como rehén a la Emperatriz Viuda.
—Solo quería un rehén y no tenía intención de herir a nadie. Desafortunadamente, pisó una gema redonda. Sus pies resbalaron y la espada en su mano apuñaló a la Emperatriz Viuda.
—Su expresión cambió.
Todo sucedió demasiado rápido. No tuvo tiempo de retraer su espada o esquivar.
—La Emperatriz Viuda observó atónita como la espada se le clavaba.
Puchi
—La hoja afilada golpeó.
El Emperador Jing Xuan cayó frente a la Emperatriz Viuda.
—Un experto se apresuró y pateó al Rey Nanyang lejos. La espada en el pecho del Emperador Jing Xuan fue extraída.
—La sangre salpicó por todo el suelo.