Xiao Tian, te amo

—Xiao Tian, te amo. ¿Quieres ser mi novio? —Xi Xingyi expresó sus sentimientos por él otra vez.

—¡Qué tierno! —dijo él—. Mi corazón se derrite al escuchar tus dulces palabras.

—Deberías responder a mi pregunta de inmediato —ella lo obligó a responder su pregunta enseguida.

—Aceptaré ser tu novio si duermes en mis brazos esta noche —como de costumbre, intentó aprovechar la situación.

—¿Somos amantes ahora? —Xi Xingyi no perdió el tiempo y se recostó sobre su cuerpo inmediatamente, enfrentándolo.

—Me convertiré en tu amante si tenemos sexo de nuevo —claro, estaba bromeando porque solo quería molestarla.

—¡...pervertido! —frunció los labios.

—Hehe —a Xiao Tian le pareció graciosa su expresión—. ¡Mi amante es tan linda!

El corazón de Xi Xingyi se llenó de felicidad al escuchar sus comentarios. Una suave sonrisa se extendió por su rostro después de poner su cabeza en su pecho.

«Tengo un nuevo amante ahora. Un joven diabólicamente guapo para colmo.»