AURORA

PUNTO DE VISTA DE JAZMÍN

Jazmín primero decidió que la cocina necesitaba una limpieza masiva.

Estaba sucia con tantas ollas goteando y bastante inestable.

—¿Por qué está así? —preguntó Jazmín genuinamente confundida.

El estado de la cocina era otra cosa.

—La difunta señorita Aurora siempre decía que se iba a hacer una renovación —dijo Mya—. Pero nunca vimos nada.

Jazmín frunció el ceño.

Por lo que sabía, las manadas tenían presupuestos.

Presupuestos para la sala de entrenamiento, la cocina, los terrenos del castillo y todo lo demás.

También había un libro de cuentas que se utilizaba para hacer los cálculos y registrar cada dinero que se suponía que se debía poner en la manada.

Tenía que estar en alguna parte.

—¿Hay un contador? —preguntó Jazmín.

—Sí, Lycan Louise. Es un hombre mayor y ha estado manejando las cuentas durante años —respondió Mya.

—Me gustaría verlo —dijo Jazmín—. Pero primero creo que me gustaría ver el libro de cuentas de Aurora. Debería tener una copia.