—¿No debería haber vuelto Anaya ya? —preguntó Olivia a Emma mientras cenaban en el comedor del hostal.
No la habían visto desde que dejó el hostal esa mañana.
—Algo huele mal. ¿Quién llama a alguien para una entrevista tan temprano? Empezar el día tan temprano como empleado es comprensible pero... Nunca he visto a nadie ser llamado para una entrevista antes del horario laboral —Emma le dijo mientras masticaba lentamente su pan—. ¡Bueno! Lo bueno es que Paige estaba con ella, y tampoco está aquí para la cena así que tal vez... estén teniendo una fiesta de celebración.
Olivia le dio un codazo ligero en las costillas. —No te olvides. Aniya nos pidió que confiáramos en ella. No podemos sacar conclusiones sin escucharla.
Emma asintió con la cabeza y sirvió un poco más de sopa de verduras en su tazón cuando Olivia llamó su nombre. —Oye, Em. ¿Intentaste contactar a Anaya por teléfono?