500- Mentiroso

Jorge estaba visitando la Casa Sinclair a diario, y Abigail estaba tratando de evitarlo. O se mantenía ocupada en su habitación o salía con Alex y sus amigos.

—Esta tarde, Jorge me llevó a por helado —le contó Ariel mientras se aplicaba crema de manos en la palma—. Te extrañé.

Abigail le dio una sonrisa apretada y asintió.

Quería darles privacidad y, para ser honesta, había empezado a disfrutar más de la compañía de los amigos de Alex.

Levantó la cara y encontró a Ariel mirándola cuidadosamente.

—¿Qué…? —le preguntó Abi confundida, pensando que había algo mal en su rostro.

—Deberías visitar un salón, querida. Tu piel facial se está volviendo áspera.

Abigail asintió, dispuesta a aprender más de su hermana.

En los últimos días, se había dado cuenta de que Ariel no era para nada como Valerie. Solo sus caras se parecían, pero eran completamente diferentes. Aún así, no podía confiar en ella. Valerie también mostró su lado bueno y la hizo tonta. No quería repetir el mismo error.