Todo es normal

Xia Fang utilizó el equipo y examinó el estómago de Qiao Mei. Ambos fetos estaban muy saludables y el cuerpo de Qiao Mei no parecía haber sido afectado mucho. Todo estaba normal.

—Tía, dime rápido. ¿Hay algo mal con los niños? —Qiao Mei agarró fuertemente la esquina de su camiseta y no se atrevía a moverse, temiendo que pudiera afectar el diagnóstico de Xia Fang.

Xia Fang todavía no hablaba y sólo fruncía el ceño mientras miraba el equipo electrónico y suspiraba. Qiao Mei no sabía qué había sucedido, si había algo mal con los niños o algo mal con ella.

—Liu Wen, ven y mira esto —dijo Xia Fang señalando algunos datos en la pantalla.

Al principio, Liu Wen pensó que realmente había un problema. Ella estaba a cargo de la revisión básica de Qiao Mei y ya había hecho un chequeo completo.

—Profesor Xia, esto... —Liu Wen miró a Xia Fang con confusión.

—Recuerda tomar nota de los datos aquí y registrarlos correctamente —dijo Xia Fang mientras tocaba la pantalla.