Hoy No Hay Fantasmas Para Comer

Amelia miró la habitación llena de fantasmas y susurró a Chris —Tío Cuarto, ayúdame a detener a la Hermana Sara. Quiero exorcizar a todos estos fantasmas.

Chris asintió —De acuerdo.

Sara acababa de arrebatar su muñeca de manos de Luna, pero uno de los zapatos de la muñeca había sido llevado por Luna y no podía recuperarlo. Maldijo y parecía enfadada. Entonces vio a Chris mirándola con una expresión anormal.

Sara inmediatamente puso una sonrisa muy educada y preguntó —Señor Walton, ¿qué sucede?

Chris se frotó la nariz —Está bien.

Los ojos de Sara centellearon confusos. Estaba a punto de pasar a su lado cuando Chris de repente extendió la mano y la detuvo. Sara se quedó helada —¿Señor Walton?

Chris —Hoy hay una escena. Tú pediste permiso. El director dijo algunos puntos clave. Te los diré ahora.

Sara —??? ¿Era su cumpleaños hoy? ¿Por qué alguien hablaría de trabajo en el cumpleaños de otra persona?

Dentro de la casa.