No te voy a tratar con suavidad

Fue Shen Hanxing quien le dio el coraje para seguir viviendo. Shen Hanxing hizo que Yang Xue se diera cuenta de su error. Qué estúpida había sido. Yang Xue miró a sus ancianos padres. Las lágrimas brotaron nuevamente en sus ojos.

—Este es el número de mi asistente. Puedes contactarlo en cualquier momento —Shen Hanxing entregó la tarjeta de presentación de Han Qi y acarició la cabeza de Yang Xue suavemente—. Sonríe y dijo: Hazlo lo mejor que puedas. Todo estará bien.

Yang Xue asintió mientras se ahogaba en sollozos. Papá y Mamá Yang también agradecieron a Shen Hanxing sin fin. La audiencia en la sala de transmisión en vivo se conmovió por las acciones de Shen Hanxing. Empezaron a gustarles más Shen Hanxing y a detestar aun más a Shen Sisi. Los comentarios en la sala de transmisión en vivo estaban todos regañando a Shen Sisi.