—Por favor, no llores si te caes —alguien te dirá suavemente que está bien—. Por favor, no estés triste cuando llueva —el sol atravesará las nubes oscuras y brillará en el suelo—. Todos hemos tenido diecisiete años. La alegría de tener diecisiete…
—Una voz como un manantial claro inmediatamente llevó a la gente de vuelta a un periodo de juventud.
Era como si pudieran ver pilas de materiales de estudio y un sinfín de exámenes.
Parecían haber escuchado las cigarras de ese verano y recordaron cómo eran de jóvenes.
Nadie había escuchado la melodía principal antes. Nadie había escuchado esta canción antes. La melodía era ligera y lenta. La voz era como un arroyo pequeño que fluye desde las montañas. Estaba llena de vida y energía.
Después de la primera experiencia, la audiencia comenzó a presionar los botones cuando oyeron la segunda frase.
—¡Esto era una fiesta del sonido!
—¡Es tan hermoso! ¡Mis oídos están embarazados!