Sin embargo, Zhang Xiaoying agarró la muñeca de Lu Man —¡Explícate claramente!
Han Zhuofeng ya le había empezado a caer mal a esa mujer desde hacía tiempo, y directamente le quitó la mano a Zhang Xiaoying de encima de Lu Man y la empujó hacia un lado —Ya lo dije una vez, ¡no es asunto tuyo! ¡No te hagas aún más papelones cuando ya te estamos dando la cara!
Lu Man no quiso ocuparse de Zhang Xiaoying y aprovechó la oportunidad para entrar al aula a recoger sus cosas.
Después de ser regañada por Han Zhuofeng frente a una multitud, Zhang Xiaoying estalló, negándose a dejarlo así nomás —¡Han Zhuofeng! ¡Ten cuidado!
Han Zhuofeng se burló con desdén —¡Tú también ten cuidado!
Mientras tanto, en el aula, Zheng Yuanshi preguntó con sorpresa —¿Lu Man, te vas ahora mismo? ¿Ya no necesitas ir a clase?