El Sistema Era Realmente Bastante Miserable

—Sistema, sal —dijo Jiang Xun.

El sistema no tenía palabras.

Realmente quería hacerse el muerto ahora.

Sin embargo, el sistema no podía escapar. Solo podía aparecer con cautela.

Su voz estaba llena de halagos.

—Anfitrión, ¿me estás buscando? —la voz del sistema sonó con cautela.

Cuando Jiang Xun oyó la voz del sistema, su expresión se volvió aún más fría.

—Aún tengo algo que decir —su tono era serio.

—Sí, ¿qué quieres decir? —inquirió el sistema.

Al oír la voz cautelosa del sistema, el corazón de Jiang Xun estaba tranquilo. Ella solo dijo:

—Anteriormente, dijiste que no podía contarle a nadie sobre el sistema. Si quería decir algo, aparte de recibir castigo y advertencia, el sistema también podría hacerme incapaz de hablar o escribir. No podía contarle a nadie sobre la existencia del sistema de ninguna forma.

—Sí —confirmó el sistema.

El sistema no entendía. ¿Había enfadado este asunto a Jiang Xun?

¿Por qué Jiang Xun quería tanto contarle a Mufeng sobre su existencia?