No era fácil para Tang Moyu aceptar el hecho de que Zhang Jiren fuera su gemelo. Esta no era la revelación que esperaba cuando decidió confrontar a su esposo sobre aquel hombre. ¿Y pensar que había sido llevado y criado por la familia Zhang?
¿Cuánta animosidad sentía Zhang Wuying contra sus padres como para hacer algo tan despreciable como arrancarle su gemelo y a Tang Lixue? Era increíble cómo una persona podía ser tan egoísta que no dejaba a nadie ser feliz solo porque ella no había obtenido lo que quería.
Feng Tianyi la había dejado llorar hasta más no poder, dejándola desahogar la pena y frustración que había mantenido para sí todo este tiempo. No podía culparla por reaccionar así, especialmente cuando recientemente habían perdido a Tang Beixuan.