Encuentro

Kyle entró al bar donde estaba Gracy. Ella estaba bebiendo sola con su disfraz puesto. Él negó con la cabeza y se sentó frente a ella. Llevaba una peluca de cabello rojo corto.

—Sabes que él desatará el infierno si te ve implicada en un escándalo y arrastras su nombre, ¿verdad? —comentó Kyle con el rostro tenso.

Gracy... era una mujer a la que una vez amó y por la que se preocupó profundamente.

—¡¡¡Esa perra!!! ¿Por qué no la detuviste de volver, eh? Dijiste que la amabas, entonces ¿por qué dejaste que volviera cuando tuviste tu oportunidad con ella?! —Gracy ladró tan pronto lo vio y Kyle miró alrededor para comprobar si alguien la había escuchado. Afortunadamente, el lugar no estaba muy concurrido y su mesa estaba suficientemente lejos de las demás.

—¡Gracy ya basta!! Llamaré a tu chofer para que te lleve de vuelta a casa —siseó Kyle y agarró su teléfono móvil para llamar a su conductor, pero Gracy le arrebató el teléfono.