La mañana siguiente, Daryl se despertó temprano para recoger a Kenzie en el hospital e ir a trabajar juntos después de desayunar con su suegro. Su suegro ya estaba despierto cuando llegó.
—Buenos días, padre —lo saludó con una sonrisa radiante. Jack solo asintió y lo observó colocar las frutas en la mesa y sacar también las bolsas de papel con el desayuno que había traído.
—Pedí tu plan de dieta al médico y preparé algo aprobado por tu dietista —comentó Daryl mientras sacaba la mesa bandeja para su suegro.
—Espero que te guste... —dijo Daryl mientras lo acomodaba en la bandeja. Jack tosió e hizo señas al Mayordomo Mark para que se lo quitara a Daryl y lo arreglara él mismo.