Scarlet Phoenix

—¡Maldición! Soy tu hija biológica, y me tratas como si me hubieras recogido de la calle. ¡De hecho, me tratas peor que eso! —exclamó Qiao Nan.
—Qiao Nan, no eres tan bonita ni tan inteligente como tu hermana mayor. No estás tan bendecida como ella. ¡No tienes derecho a estudiar, casarte, ni a tener tu felicidad! —respondió Madre Qiao.
—¿Por qué no se me permite estudiar, casarme o buscar mi felicidad? ¡Encontraré a un hombre ahora mismo y me casaré con él! —declaró Qiao Nan.
Qiao Nan se queda boquiabierta al descubrir que el hombre justo al lado suyo es una figura poderosa en el cuadrilátero—la persona con las perspectivas más prometedoras para ser el futuro Jefe.
Qiao Nan mira fijamente al hombre fornido frente a ella. Tiene abdominales firmes y ojos fríos e intimidantes. Traga el nudo en su garganta mientras dice sus saludos —¡Buenos días, Jefe!

Renacimiento a un matrimonio militar: Buenos días Jefe

—Escuché que no solo el departamento de educación en Ping Cheng. Incluso el departamento de educación en la provincia está ansioso y prestando mucha atención a este asunto.


—Wei De encendió un puro y dio una profunda calada —.¿Es tan serio este asunto? ¿Por cuánto tiempo van a investigar esto? ¿Hasta qué punto van a meterse con esto?


—¿A qué te refieres? Si los sectores gubernamentales no se preocupan por este asunto, ¿cómo pueden decir que están al servicio del pueblo? Este asunto tiene un impacto adverso. Además, creo que habrá muchas repercusiones. ¿Cuánto tiempo? Tendremos que ver dentro de diez días —Zhai Hua se sentía perturbada y exasperada. De hecho, debería sentirse feliz de que Qiao Nan haya encontrado esto.


Si Qiao Nan era demasiado sobresaliente, Wei De parecería demasiado inútil en comparación.


Sin embargo, todos se habían conocido por tanto tiempo. Era irrazonable que Zhai Hua esperara que Qiao Nan tuviera un mal desempeño en el examen.


Estás muy complacido