El hombre se secó el agua del cuerpo con una toalla y recogió su teléfono de la mesa para echar un vistazo. Vio un mensaje del Ejército de Hackers Problemáticos. —Aniquilador de Dios, la misión ha fracasado. La comisión ha sido devuelta completamente a tu cuenta. Según las reglas, te compensaremos con otro billón. No le digas al mundo exterior que hemos trabajado juntos en el futuro, mucho menos nos busques nuevamente porque no aceptaremos ninguna misión que publiques.