Ares de repente se dio cuenta de que la persona de pie frente a él no era basura, sino una bestia feroz.
Su larga espada temblaba en su mano, y su voz, profunda y ronca, aulló:
—¡Insensato mortal, soy de linaje divino, el elegido, quién puede matarme?
Sus músculos continuaban creciendo en tamaño, y su piel lentamente pasaba de blanca a negra mientras todo su rostro comenzaba a torcerse y deformarse.
Su equipo de alpinismo comenzaba a rasgarse con un sonido desgarrador.
Originalmente de unos 1.8 metros de altura, debido a la transformación de sus músculos y huesos, ahora había crecido a más de dos metros.
Había dos protuberancias en su cabeza, semejantes a los cuernos de un ciervo brotando dos bultos.
Sus piernas estaban dobladas, llenas de poder explosivo, construidas únicamente para la batalla.
Al final, una criatura casi negra en color aparecía ante Long Fei y Lin Yingying.
Ambos se sorprendieron, nunca habían esperado que la verdadera forma de Ares fuera así.