Wang Xiaoya ya estaba ansiosa, y al escuchar esto, se preocupó aún más.
Si el Alma Nascente de Long Fei no estuviera sellada, no estaría tan nerviosa.
Ahora, Long Fei estaba dependiendo completamente de la fuerza de su cuerpo físico para romper la formación, y aún no estaba claro qué sucedería después.
Wang Xiaoya apretó su pequeña mano, pensando que si Long Fei no salía pronto, tendría que entrar.
Después de un rato, Tío Gui fue el primero en hablar con voz sorda:
—Este chico podría estar acabado.
Xie Sanniang dijo:
—Eso es seguro. Esta formación es formidable. ¡Ni siquiera yo puedo entenderla por completo, mucho menos él!
Jiu Ge y Yu Ping comenzaron a dar patadas frenéticas al suelo, pensando que definitivamente estaban acabados ahora.
Entre la multitud, había dos ancianos.
Uno era el Maestro de la Técnica de Mecanismo de la Familia Gongsun, y el otro era de la Familia Mo.