capítulo 11

11 de noviembre de 1982, verano.

Hoy hacia cerca de treinta grados, muchas personas fueron a la playa y esto fue igual para la familia Ledesma.

Los hombres tenían sus toros desnudos mostrando sus grande cualidades.

Un gran lomo, abdominales marcados, hombros anchos y enormes brazos.

Las mujeres de la familia Ledesma estaban doradas genéricamente, grandes pechos, y un trasero natural y grande.

Una hermosa piel marrón saludable, hermosos rasgos faciales y hermosos cabello largo.

Tadeo por su parte tenía su pecho al aire, su pelo largo ahora le llegaba a la mitad de la espalda.

Sin embargo el estaba bajo una sombrilla mientras miraba a su familia en el agua.

Titán estaba corriendo cerca de donde estaba pero atento a él, Tadeo tenía sus rodillas al pecho y observaba atentamente a todo.

Su expresión estaba oculta por sus brazos qué estaban apoyados en sus rodillas.

Su pelo largo estaba suelto, negro brillante, lacio y hermoso.

Hoy era un día especial para la familia, era el cumpleaños de los mellizos.

La familia de cinco después de estar un rato en el agua de la playa, fueron a donde Tadeo.

Titán fue a jugar con otros perros.

-¿Qué pasa Tadeo?- preguntó Diego y este respondió.-¿querés que pase algo?-

-contesta bien concha de tu madre.- Dijo Eduardo golpeándole la cabeza a su hermano menor.

-¿Por qué no te metes al agua peque?- preguntó diego mientras tomaba un trago de gaseosa.

-no sé nadar- dijo mirando el agua.

-¿te enseñamos?- dijo Eduardo, Marcelo por su parte se levantó de la nada.

Le agarro por la nuca y por la pierna mientras corría hacia el agua Tadeo protesto fuertemente.

Los hermanos mayores acompañaron al dúo, y se metieron al mar, Marcelo con fuerza lo arrojo y le dijo que así iba a aprender.

Tadeo con todas sus fuerzas trató de flotar y en pocos segundos pudo, sus hermanos aún así se mantuvieron a su lado.

Diego puso sus manos en el pecho y en su estómago a Tadeo, quien este estaba panza abajo.

Le dijo como patalear y moverse con los brazos, a la vez como respirar lavando su cara a un lado.

Eduardo mostró la teoría haciéndolo, Tadeo poco a poco aprendió a nadar.

Al poder hacerlo comenzó a nadar en conjunto con sus hermanos, y en pocas horas comenzaron a competir entre ellos.

Al salir del mar fueron a donde estaban sus padres, Florencia fue a caminar por la playa con algunos de sus amigos y amigas.

Los hermanos se sentaron, comieron y bebieron, dejaron que el sol tocará sus cuerpos.

Los mellizos al tener 25 años, buen estado físico, sonrisa hermosa y muy carismáticos llamaron la atención de muchas mujeres.

Ellos no eran ciegos, aprovecharon sus dotes y fueron a explorar en terreno.

Sus padres fueron a pasear a lo largo de la playa.

Titán volvió cansado y algo lastimado, y Tadeo volvió a estar solo pero no aburrido.

'solo otra vez, supongo que es común en esta época dejar a los niños solos ya que hay mucha seguridad o algo así'

Pensó él.

'¿Cómo puedo hacerme ver ante el mundo, es cuestión de suerte o habilidad?'

Dudó Tadeo con el ceño fruncido y mirada seria mirando a la nada.

'¿el taller de música tendrá relaciones con productores o algo así?

¿o tendré que usar la antigua usanza de tocar callejeramente? ¿les llamare la atención?

¿y cuando les acostumbre a tocar cierto genero, me dejaran tocar rock?

¿Qué debo hacer?'

Pensó por mucho tiempo Tadeo mientras se revolvía el pelo largo.

'voy a decirles a papá y a mamá que voy a la plaza España a tocar y a ver si llamo la atención a alguien'

'dos años más y tengo que ir a primaria, que paja aguantar tantos pendejos'

Pensó mientras se acostaba en el suelo a la vez que miraba el cielo despejado.

Horas después de soledad en la playa, la familia volvió a juntarse, juntaron sus cosas y limpiaron.

Se subieron al auto y la familia fue a su hogar.

En la noche, como cada cumpleaños, familiares y amigos trajeron comida y bebida.

Esto se volvió una rutina, hombres cocinando la carne afuera y bebiendo y mujeres adentro haciendo ensaladas y poniendo la mesa.

Los hombres afuera ya entonados comenzaron a cantar folclore y de la nada trajeron las guitarras de que estaban en la habitación de Tadeo.

Tadeo también fue traído para tocar y cantar junto con los demás.

Nelson, el amigo de la familia y muy personal de Marcelo, comenzó a tocar en conjunto con Tadeo.

El niño al ser el centro de atención, le robo la gorra qué tenía puesta Eduardo, y al ajustarla comenzó a puntear la guitarra.

Marcelo les contó sobre los temas que creo su hijo y muchos comenzaron a alentarlo a que cantara.

Tadeo se achicó ante esto, fue a su habitación y trajo las hojas qué escribió y mostró los acordes a Nelson.

[🎶🎵🎶🎵 nada tengo de ti – Los TucuTucu

Nada tengo de ti

Y lo tengo todo…

Aunque tú no lo sepas,

Eres tan mía.

Eras mía, hace tiempo, cuando el Otoño

Me asomaba a la puerta de mis jardines.

Te veía pasar

Como una estrella

Hecha toda de luz,

Pero tan lejos.

Y hoy que tan cerca estás no puedo amarle

Porque tu corazón ya tiene dueño.

Yo sé que tú me quieres, alma mía,

Culpable soy de haber llegado tarde.

Y ahora que te mueres con mi muerte

Pregunto, qué es la vida sin tenerte

Yo sé que aunque lo niegues también sufres.

La rosa no es feliz entre las piedras.

Tus ojos y tu voz, hecha de llanto,

Pregúntenme por qué tardaste tanto

Qué sabrán del amor los que te tienen.

Amor, fue mi callar por tanto tiempo.

Amor, fue mi sufrir siempre en silencio

Y es aún hoy el morir

Cuando te pienso.

Yo sé que tú me quieres, alma mía,

Culpable soy de haber llegado tarde.

Y ahora que te mueres con mi muerte

Pregunto, qué es la vida sin tenerte

Amor, nada tengo de ti

Amor, nada tengo de ti

Amor, nada tengo de ti

Na~da~

🎵🎶🎵🎶]

-ni que te hubieran rotó el corazón pendejo- dijo riéndose del asombro diego.

-¿no tenes un tema más alegre boludo?- dijo Nelson mientras miraba a Tadeo.

-si. Busca ahí entre las hojas y te digo cuales son.- dijo Tadeo mientras marcaba los temas que no eran de desamor y así.

-necesito un bombo para tocar este.- dijo el niño mientras dejaba la guitarra a su padre y agarraba el bombo.

[🎶🎵🎶🎵 luna tucumana – los chalchaleros.

Yo no le canto a la luna

Porque alumbra nada más

Le canto porque ella sabe

De mi largo caminar

Le canto porque ella sabe

De mi largo caminar

Ay, lunita tucumana

Tamborcito calchaquí

Compañera de los gauchos

En los cerros del Tafí

Compañera de los gauchos

En los cerros de Tafí

Perdido en las cerrazones

Quién sabe, viditay, por dónde andaré

Mas cuando salga la luna

Cantaré, cantaré

A mi Tucumán querido

Cantaré, cantaré, cantaré

(¡Segunda!)

Con esperanza o con pena

En los campos de Acheral

Yo he visto a la luna buena

Besando el cañaveral

Yo he visto a la luna buena

Besando el cañaveral

En algo nos parecemos

Luna de la soledad

Yo voy andando y cantando

Es mi modo de alumbrar

Yo voy andando y cantando

Es mi modo de alumbrar

Perdido en las cerrazones

Quién sabe, viditay, por dónde andaré

Mas cuando salga la luna

Cantaré, cantaré

A mi Tucumán querido

Cantaré, cantaré, cantaré

🎵🎶🎵🎶]

Después de tocar varios temas, finalmente el asado fue servido, el vino, cerveza, fernet y gaseosa estaba repartido en la mesa.

Y al ser verano comieron afuera, disfrutando del viento un poco caliente pero con la bebida fresca creaba una sensación satisfactoria.

Después de dos horas de comer, tanto hombres y mujeres hicieron sobremesa, es decir, charlar mucho tiempo y comer y beber con el tiempo.

Horas después de charlas comenzaron nuevamente a tocar canciones conocidas y que creó Tadeo.