—¿Cómo puedes esperar que los demás sean educados si tú mismo no lo eres? La cortesía es una calle de doble sentido. Incluso al pedir direcciones, debes mostrar la actitud correcta en lugar de parecer arrogante.
Lu Jiang se había ido, y el estado de ánimo de Feng Qingxue no era el mejor para empezar. Encontrarse con esa situación en el camino lo hizo aún peor. No pudo evitar preguntarse quién sería tan desafortunado de tener un pariente así. Afortunadamente, cuando vio a Xibao, todo pareció disiparse.
Lu Tianjun no estaba trabajando hoy. Estaba sentado en la puerta, tomando el sol con el bebé regordete en sus brazos.
El clima de hoy estaba excelente, el cielo era azul claro, las nubes blancas suaves, y los carámbanos goteando componían una melodía melodiosa.