143: Mi hijo se ha ido al extranjero, ¡es increíble! _3

Lin Fang es ese tipo de persona. Cuando todo va bien, es tan amable como una madre amorosa podría ser. Pero cuando las cosas van mal, le da la espalda a todos.

Si perjudica los intereses de Lin Fang, ni siquiera una relación madre-hija evitará que sea implacable.

—Lo siento, mamá, lo siento... —Sangre goteaba de la boca de Chang Yue, distorsionando sus palabras.

—¡Ve a enfrentarte a la pared y reflexiona sobre tus acciones! —Lin Fang señaló la pared—. ¡Ve ahora!

Chang Yue caminó hacia la pared, se arrodilló y comenzó a reflexionar.

En ese momento, hubo un golpe en la puerta.

Lin Fang arregló su cabello y fue a abrir la puerta.

La visitante era la Abuela Lin, que no podía esperar para decir:

—Fang Fang, ¿qué pasó? ¿Está resuelto el asunto?

—Se canceló. —La cara de Lin Fang se veía muy desagradable.

—¿Cancelado? —La Abuela Lin estaba asombrada—. Se suponía que era un trato hecho. ¿Por qué se echaría a perder?