La nueva casa tiene dos dormitorios en el primer piso, un cuarto de almacenamiento, un baño y una sala de estar grande. Los segundos y terceros pisos juntos tienen siete habitaciones y un baño; cada habitación de arriba tiene un balcón.
De pie en el balcón de la habitación que da al norte, se podía ver el huerto cultivado por el Abuelo, mientras que desde el balcón de la habitación que da al sur, se podía observar la situación en el camino adelante.
—¿Por qué has venido aquí? Aún no está ordenado, y deberías tener cuidado al caminar —dijo Luo Daoren al ver a su nieta acercarse.
—Tenía miedo de que trajeras demasiadas cosas tú solo, así que vine a recogerte y también a verificar el progreso de la casa —respondió Luo Qiao.
Al tocar este tema, Luo Daoren habló con algo de enojo:
—No sé qué pequeño sinvergüenza se llevó la gran sandía de la que estaba guardando semillas. Había montones de otras sandías colgando en la vid, pero tenía que elegir esa.