Qian Caihong observó cómo Lu Yichen se alejaba. —Tía, ¿puedes ayudarme?
Qian Xiue suspiró. —Caihong, deberías olvidarte de esa idea. Él está comprometido. ¿Cómo podría romper su compromiso con una graduada de la universidad para casarse contigo? Tu segundo tío encontrará a alguien más para ti.
Qian Caihong miró a Lu Yichen, quien había entrado por la puerta, pensando que, aunque mirara de nuevo, no habría nadie mejor que Lu Yichen: tan joven y exitoso, y además tan guapo.
En su corazón, reflexionó sobre cómo lograr que Lu Yichen se casara con ella. Desde que llegó a la casa de su tía, había empezado a sentir afecto por el Subdirector Lu, pero él siempre la trataba con frialdad, lo que solo hacía que le gustara más, incapaz de detener sus sentimientos.
Pensó en todo tipo de métodos, pero finalmente desechó cada uno.
De vuelta en el patio, vio que su segundo tío ya se había levantado y lavado. Rápidamente puso la mesa del desayuno. —Segundo Tío, el desayuno está listo.