Aún había una brecha en sus experiencias que dejaba a Rosa sintiéndose perdida.
Al percibir su lucha, Kisha decidió ofrecer más orientación.
—Si realmente quieres ayudar a alguien pero no estás segura de su carácter, tráemelo y evaluaré si pueden unirse a nuestra base. Y si descubren nuestra ubicación y se lo cuentan a otros refugios, no importará, somos lo suficientemente fuertes para proteger nuestro hogar y nuestra gente.
—Te ofrezco esta oportunidad para que no pienses que soy insensible —Kisha terminó con un tono ligero, una sonrisa juguetona adornando sus labios.
Esto aportó un sentido de ligereza a la conversación seria, y Rosa sintió una ola de alivio inundarla.
¿Cómo puede Kisha ser tan confiada en seleccionar personas?