—¿Por qué todos son tan crueles conmigo? —Hugo se quejó, incapaz de soportarlo más—. ¿Dónde está Slater? ¡Él usualmente toma este rol, no yo!
Allison negó con la cabeza, rindiéndose con sus chicos mientras su atención se trasladaba a Penny y Zoren, quienes parecían estar disfrutando el momento.
—Zoren, ¿cómo te sientes, querido?
—Me siento… —Zoren dejó la frase inconclusa, lanzando una mirada a su esposa y sonriendo—. Mucho mejor de lo que pensaba. Mejor de lo que nunca me he sentido.
—El doctor dijo que estás recuperándote, y que lo de ayer solo fue tu cuerpo deshaciéndose de las toxinas —Penny le apretó la mano, ahora sentada a su lado con la espalda contra el cabecero—. ¡La medicina está funcionando, Renren! Estoy tan feliz.