584

—He Jingyu condujo a Wang Shuilian a la casa principal.

La Tercera Abuela Qi se alegró mucho cuando vio que era Wang Shuilian y rápidamente dijo:

—Shuping, ve y sirve una taza de agua caliente para el Doctor Wang. Debe haber sido un viaje duro.

—Eres demasiado amable, Tercera Tía. En nuestra profesión, siempre estamos de guardia. Desafortunadamente, hoy no estaba en casa; fui a la ciudad del condado a comprar medicinas. Comenzó a llover en el camino de regreso, y para cuando llegué a casa, mi ropa estaba empapada. Por suerte, la medicina que compré estaba bien envuelta, así que no se mojó —explicó Wang Shuilian aprovechando la oportunidad para aclarar que realmente no había estado en casa y no había fallado en venir a propósito.

Wang Shuping trajo el té caliente, se acercó y dijo:

—Doctor Wang, por favor, tome un poco de té.

—Gracias —dijo Wang Shuilian aceptándolo con gratitud.

Wang Shuping trajo algunas semillas de girasol y bocadillos, los colocó sobre la mesa y dijo: