—¡Más te vale lavarte la boca! —No importa cuán amable y paciente sea un hombre cuando escucha que alguien se burla de él diciendo que en realidad lleva una gorra verde no puede soportar la vergüenza, al segundo de escuchar que la mujer frente a él decía que su esposa y su hermano estaban enredados en un lío innombrable, no pudo evitar levantarse del sofá y gritarle mientras le señalaba la nariz.
Song Yan lo ignoró, pero Li Wenyi no.
—¿Por qué te alteras tanto? —Li Wenyi se puso frente a Song Yan y miró a Yao Nian con una sonrisa arrogante en su rostro—. ¿No dijiste que personas como nosotros deberíamos mirar las cosas que son más importantes y nada más? ¿Por qué te alteras tanto con ella así? Tu esposa también es modelo y el hombre en cuestión es tu hermano, ¿no querrías que te llamen nombres si este asunto saliera a la luz?