Una buena chica

Song Yan observó el retrato frente a ella, su expresión cambió rápidamente cuando se dio cuenta de que la mujer había tomado protección bajo la capa de muchas formaciones pero aun así sacó un talismán y lo pegó en el retrato. Tan pronto como el talismán de la justicia ardiente entró en contacto con el retrato que estaba protegiendo una entidad maligna, comenzó a quemar todo el conjunto.

De todos modos, Song Yan pensó que la mitad de la entidad que residía dentro del retrato estaba destruida y debería ser capaz de eliminar esto con el uso de su talismán, pero para su sorpresa, incluso después de arder durante diez minutos seguidos, el retrato permaneció como estaba y ni siquiera se veía una marca en él. Song Yan entrecerró los ojos mientras miraba el retrato, pero luego de repente escuchó que un hombre gritaba detrás de ella.