Song Yan terminó de charlar con Yu Pan y fue a ducharse. Después de arreglarse, comenzó a organizar su ropa en una maleta ya que no quería bajar y ver a Fu Yu Sheng. Este último había tomado unos días libres en la empresa porque quería seguirlos a todos al militar. Sabía que si bajaba podría realmente golpear al chico con su puño, por eso decidió quedarse en la habitación e ignorar a ese hombre lo más fuertemente posible.
Sin embargo, cuando estaba empacando sus maletas, la puerta de su habitación se abrió y Fu Yu Sheng entró con una bandeja que tenía comida. Miró a Song Yan y dudó un momento antes de entrar, puso la bandeja en la cama y dijo —Deberías comer incluso si estás enojada conmigo.