Ella estaba de pie al frente, mientras él estaba detrás y ambos tenían sus ojos fijados en el humano en el suelo.
Si no tuviera a T4, su primera suposición habría sido que lo atraparon a él o a ella, pero según T4, esta persona estaba viva.
—Más de una docena de balas y todos tus láseres y aun así esta persona sigue respirando —dijo en voz alta, con la intención de que Muyang escuchara sus palabras.
Quería que él tuviera cuidado y no se acercara imprudentemente a la persona en el suelo que estaba fingiendo estar muerta.
—Oye, deja de hacerte el muerto, puedo oír tu corazón latiendo —dijo.
—Y puedo ver las pequeñas aleaciones de metal moviéndose en tu sangre —añadió Muyang. Aunque parecía estar tranquilo en la superficie, en el fondo estaba un poco inquieto por esta persona.
—¡¿Puedes?! —ella levantó la cabeza y miró a Muyang.
—Mmm —él asintió.
—Guau, eres genial —lo elogió ella—. De verdad, el mejor.
T4 no estaba de acuerdo y le dijo: