Ligero y Alegre

Con las bromas de Mary, el ambiente en el comedor se volvió ligero y alegre de nuevo. Sin embargo, la reacción de Amy permaneció neutral mientras se preocupaba por lo que Rei y Henry dijeron. Justo cuando ella pensó que podrían vivir con normalidad nuevamente, surge otro problema. «¿Cuándo se detendrá?», pensaba.

—¿Estás bien, Amy? —preguntó Henry al notar que ella estaba callada.

—Estoy bien, pero me preocupo por ti. Es obvio que quienquiera que sea esa persona, te está tomando como objetivo a ti a continuación —dijo Amy con una voz preocupada a Henry.

—¿No confías en que tu esposo también puede luchar? Soy mejor que tú, ya sabes —dijo Henry mientras flexiona su brazo musculoso.

Amy empujó el brazo de Henry mientras se reía entre dientes. Henry sonrió, sintiéndose complacido de haber podido alejar los pensamientos de Amy de todas las preocupaciones y la negatividad que ha estado pasando por su mente.