—Esta es la primera y última vez, si continúas así, te arrepentirás —Su Han miró a Duan Tiansheng, su expresión calmada, pero el frío en sus ojos hizo que la figura de Duan Tiansheng temblara considerablemente.
Su corazón estaba lleno de una furia desenfrenada, y deseaba poder devorar a Su Han bocado a bocado, pero al pensarlo de nuevo, se dio cuenta de que su propia vida estaba en las manos de Su Han. Si se atrevía a actuar imprudentemente, con el carácter de Su Han, probablemente no le importaría perder a una persona más como él.
Y la acción de Su Han esta vez sirvió como una advertencia para los demás.
La gente de la Familia Wang y los de la Secta del Bosque Lluvioso temblaron violentamente, y en la mirada que le dieron a Su Han, había una cautela profunda.
—Deja atrás todos los objetos que llevas, y te dejaré ir —dijo Su Han indiferentemente mientras escaneaba a Guyue, Song Yi y los demás.
—¡Ni en tus sueños!