Tyramisu

En cuanto Luo Yan se graduó, inmediatamente recibió una oferta de una prestigiosa compañía de videojuegos. Pensó que todo su arduo trabajo finalmente tuvo su recompensa. Y finalmente alcanzaría la cima de la vida. Pero entonces, en su primer día de trabajo, una maceta cayó sobre su cabeza y murió.
Sorprendentemente, cuando pensó que cruzaría el Río Amarillo, de repente despertó y se encontró en el cuerpo de un chico de 17 años. Este cuerpo tenía el mismo nombre que él pero un trasfondo completamente diferente. Porque el original era el segundo joven maestro de la familia Luo —una de las familias más poderosas en Ciudad S.
Luo Yan casi llora. Dios probablemente se apiadó de él y decidió darle una familia amorosa con un trasfondo acaudalado. Ya no tenía que trabajar duro, estudiar como si su vida dependiera de ello y fingir ser un santo padre solo para complacer a la gente.
Así que Luo Yan decidió ser un pez salado y simplemente vender meng sin vergüenza alguna.
Un cierto dios masculino que siempre compraba el meng de Luo Yan:
—¡Yan Yan es tan lindo! ¿Por qué Yan Yan es tan lindo??
Cara fría por fuera, rollo de canela por dentro Gong X Super hermoso, Shou de vientre negro.

El Regreso del Asesino Nivel Dios [BL]

—Lo siento, me encanta charlar más contigo, pero no soy realmente de peleas prolongadas. Así que... tengo que derrotarte ahora.


Liang Sen escuchó la voz de Borla Alada desde atrás. Entonces, antes de que pudiera reaccionar, de repente sintió que lo arrastraban hacia arriba por el cuello a una velocidad muy alta. Podía sentir la resistencia del aire. Incluso sentía un poco de falta de aliento al tener su cuello agarrado así.


Pero una cosa era segura: su oponente parecía tener la habilidad de volar. Mientras lo arrastraban, podía escuchar el sonido de algo aleteando contra el viento. Si tenía que adivinar, probablemente sería un par de alas.


No estaba seguro si era la habilidad del otro o simplemente una ventaja de cualquiera que fuera la raza de su avatar. Todo lo que sabía en ese momento era que necesitaba salir de este estrangulamiento lo antes posible. De lo contrario, ya podía imaginarse su mal final.


SÉPTIMO ENCUENTRO (II)