333 Despertar (En Medio de la Noche)

Durante un buen rato, el Anciano Xu Kong finalmente se sentó lentamente al lado de la cama, colocó su mano en su pulso y cerró gradualmente los ojos; un tenue halo púrpura iluminó la habitación. El tiempo pasaba, segundo a segundo. El sol había alcanzado su cenit, volviéndose más intenso. La mirada de Dai Yu cayó sobre la espalda del hombre que estaba frente a ella. El hombre llevaba una camisa blanca impecablemente limpia, como si hubiera descendido del cielo. Sus mangas estaban cuidadosamente enrolladas unas cuantas veces, manos en los bolsillos, revelando un tramo de antebrazos claros y fuertes. Su postura era casual, pero exudaba una presencia imponente que no debía subestimarse, inspirando una sensación de asombro. Un tirano seguía siendo un tirano, incluso una silueta podía hacer temblar el corazón de uno.

Dai Yu lo observó, una curva superficial formándose en sus labios, luego se inclinó hacia adelante y dijo con una voz melodiosa: